La figura del padre Jesús Hernández es uno de los acontecimientos enriquecedores de la cultura dominicana. El sacerdote jesuíta, un hombre que derrocha humildad, sabiduría y grandeza por donde quiera que pasa, ha dedicado su vida a servir a los demás, tanto desde su magisterio sacerdotal como humanístico.
No hay un dominicano que deje de quererlo porque dentro de su ser confluyen los caminos de la esperanza. El padre Hernández nació con la bondad como escudo y sabe sonreír, aun en las peores circunstancias. Todo el que lo conoce no podrá olvidarlo nunca porque su manera de ser y de enfrentar la vida lo acercan al prototipo de persona a la que todos aspiramos a tocar.
Además de haber “creado” la más importante biblioteca de tema filosófico que existe en el Caribe hispánico, el padre Hernández no deja de escribir. Y de estimular con sus publicaciones a todos los amantes del pensamiento y de la lectura.
No hay un dominicano que deje de quererlo porque dentro de su ser confluyen los caminos de la esperanza. El padre Hernández nació con la bondad como escudo y sabe sonreír, aun en las peores circunstancias. Todo el que lo conoce no podrá olvidarlo nunca porque su manera de ser y de enfrentar la vida lo acercan al prototipo de persona a la que todos aspiramos a tocar.
Además de haber “creado” la más importante biblioteca de tema filosófico que existe en el Caribe hispánico, el padre Hernández no deja de escribir. Y de estimular con sus publicaciones a todos los amantes del pensamiento y de la lectura.
1 comentario:
Felicidades por este blog
Te invitamos a conocer las ac tividades que está realizando la Dirección del Libro y la Lectura de la Secretaría de Estado de Cultura.
María del Socorro Duque B.
Técnica Bibliotecóloga
msdb568@hotmail.com
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